jueves, 24 de septiembre de 2020

OTRA DE FUNCIONARI@S

 Lo siento, pero aquí va:

  Me cansa que siempre que tengo que hacerle una crítica al cuerpo funcionarial del estado, hayan cientos de personas, incluyendo amig@s e incluso gente mucho más cercana, que al pertenecer a él, se apresuran a corregirme y matizar cosas. El consabido "no son todos/as", Hay mucha gente buena, etc etc...

  Y sin ponerlo en duda, debo insistir, una vez más, en que a mi deben de tocarme todos los hijos de la grandísima puta que engrosan el tejido funcionarial. Por lo cual la estadística de gente buena y decente, siempre me resulta desfavorable. Asumiendo eso, les cuento:

 Tengo a mi cargo a mi madre. Una octogenaria con problemas físicos y mentales de la cual me ocupo a tiempo completo. Y eso requiere que tenga que arreglarle cientos de papeles con diversas administraciones, públicas y privadas. Y para ello en su día tuve que proveerme de un poder notarial general, que me costó una pasta. Con ese poder he tenido acceso a cuentas bancarias, empresas de suministros de agua, luz, telefonía, etc.. y a diversas administraciones de comunidad autónoma, ayuntamiento, etc... 

 Pero con el tema del covid, y dado que ahora parece que hay que hacerlo todo telemáticamente, he intentado hacerme con un certificado digital para manejar las operaciones de mi madre, a su nombre. Y el caso es que mi poder y los DNI de ambos son papel mojado y que tengo que llevarla físicamente a que certifiquen su identidad para poder acceder a un certificado que no va a manejar otra persona que yo. Es decir, que tengo que levantar a una octogenaria, asearla, vestirla, llevarla en coche, buscarme la vida para aparcar, etc etc etc solo para que un funcionario la vea y de luz verde a su certificado digital. Lo que nunca me han pedido en otro sitio, pero aquí sí. Y la funcionaria que me atiende, tiene el día complicado, y no le sale de su soberano coño atender mi circunstancia por más especial que sea, y entre charla y chisme con sus compañeritos de despacho, decide que mi careto no es de su agrado y que me va a poner el trámite en china. Y visto lo visto, repliego velas y me busco otra salida, que ya sé de sobras lo infructuoso que es enfrentarse a uno de estos endiosados que están tras un mostrador público.

 Como dije, tengo amigos y familiares en el cuerpo funcionarial, y ellos siempre encuentran una excusa o un motivo para justificar la actitud altanera de un "compañero". Pero por más familiares o amigos mios que sean, no pueden dejar de anteponer una actitud corporativista en la que, por alusiones, entienden que siempre deben justificar las aberraciones de uno de su calaña.

 Pues bien, vengo aquí a cagarme en la puta madre de todos ellos, incluyendo a familiares y amigos. A decir que me quedo con todas las caras, y ruego a Dios que algún día, por alguna circunstancia, cualquiera de esas caras caiga en mis manos con cierto poder de joderle el día, porque voy a hacerlo sin pestañear. Que comprendo que su cargo, ganado con el sudor de su estudio y años de oposiciones, tiene unos privilegios que comparto y aprecio (estabilidad laboral y salarial), pero que lo que no creo es que NADIE deba ganarse por aprobar unas oposiciones, la potestad de hacer el ganso y joderle la vida a otra persona simplemente porque no tiene miedo ni a represalias ni a despidos. Que esa actitud, propia de gente sin competencia, es mezquina, insolidaria y merece un castigo, por más inmunes que se sientan. Y que los detesto, incluso por encima de mis posibilidades.

 Pero ojo, que en la bajadita los espero. Y que en ocasiones, la vida da una vuelta inesperada para todos. Allí estaré.